Se trata de un pequeño encargo para la reforma y diseño de interiores de un conjunto de oficinas y viviendas reconvertidas en apartamentos turísticos.
Inicialmente concebidas como planta diáfanas, nuestro proyecto recoge los espacios ya generados con su anterior uso, los recorta y modula ligeramente y añade particiones que manifiestan su corporeidad con la propia materialidad bien del ladrillo, bien de la plasticidad del carton-yeso, tratado como acabado de textura adecuada al concepto ecléctico que el cliente tenía de sus apartamentos turísticos.
El proyecto con presupuesto muy ajustado, incluía el diseño y fabricación de luminarias y muebles con maderas y carros reciclados.